Maratón de bicicletas partirá de JP en junio


ANDY ZAGASTIZÁBAL

Los ingenieros John y Jonathan Hicks tienen un entusiasmo contagiante por las bicicletas. No sólo tienen modernos y bien cuidados aparatos de dos ruedas, sino que le han tomado un cariño especial hasta convertirse en promotores del ejercicio y de todas las posibilidades de esos vehículos que no gastan energía provocadora de humo y son de lo más amistosas con el medio ambiente.

El entusiasmo los ha llevado a convertirse uno en director y el otro en activista de Bikes not Bombs.

Allí pasan la mayor parte de su tiempo libre de las obligaciones profesionales y uno de ellos ha llegado al punto de convertir también a su novia en otra amante de las bicicletas.

Los hermanos Hicks, que son hijos de una peruana y un descendiente de irlandeses nos hablaron emocionados de las otras posibili-dades que les están encontrando a las bicicletas en países como El Salvador, Guatemala u otros del África.

Uno de ellos pidió una licuadora a una de sus tías y se demoró mucho en devolverla porque la había convertido en parte de un proyecto en el MIT de “hacer en Boston lo que funciona perfectamente en hogares de El Salvador: Licuadoras movidas con energía resultante de las bicicletas”.

Alguna vez escribimos sobre el tema y ya podemos anunciar que viene otra feria en el MIT con ideas de bienestar en el hogar, la pequeña industria o la agricultura reciclando bicicletas.

Compartiendo sus emociones con el trabajo o servicio que realizan en Bikes Not Bombs los Hicks nos contaban de la novedad que es Retail Bicycle Shop! un segundo frente de la institución que promueve desde Jamaica Plain el uso de las “bikes”.

Dicen que como en los talleres de mecánica de vehículos automotores, este nuevo local es un “full-service bike shop”; es decir, un taller completo donde puede encontrar también bicicletas usadas en excelentes condiciones, partes y accesorios que se necesitan para una reparación y hasta le dan clases a los adultos que quieran hacer sus propias reparaciones.

Se podría decir que este es un negocio; pero se aclara que los precios son realmente accesibles y que los fondos que se logran van directamente a los programas y servicios que tienen BNB. Lo mejor de todo es que se crean oportunidades de trabajo para los que se gradúan, o se les orienta a abrirse camino en la pequeña empresa creando sus propios talleres.

Ya sabemos que las bicicletas son la mejor manera de reducir gastos en el transporte y ahora que vienen las estaciones más agradables para disfrutar de la naturaleza, vendrá otro “boom” del uso de bicicletas, al punto que hay un proyecto en el City Hall para establecer puntos donde podamos alquilar bicicletas por horas o el tiempo que se necesite

¿Dónde está ubicada esta nueva facilidad del BNB?

Pues muy cerca de la Green St. Stación en esa nueva porción que es Bartlett Sq.

Hablemos de las clases, ¿son en español también?

Por el momento no; pero ya vienen y todo dependerá de la cantidad de alumnos interesados, indica el profesor Wilson Martínez, quien agrega que ya tiene todo preparado. Aquí hay que indicar que para participar en los cursos se debe ser miembro; es decir, tener credencial del BNB, que se consigue donando, trabajando o sirviendo como voluntario.

Y ¿qué pasa con la Bike-A-Thon?

Pues estamos emocionados en la organización de esa actividad que tendrá lugar el domingo 7 de junio, partiendo y llegando todas las competencias a la Estación del Tren Naranja Stony Brook, exactamente en ese campo gigante que se ubica entre las calles Boylston y Amory.

¿Quiénes pueden participar?

Todos. Depende de la habilidad y las energías que se tengan para correr o mantenerse en ejercicio. La edad tampoco es impedimento para par-ticipar porque ya tuvimos ciclistas desde los dos añitos de edad hasta los 75.

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *